Cuando el mayor honra al menor, engañarle quiere.
La mucha miel, empalaga.
Por mucho dulzor, no es mejor.
Nadie lamiendo engorda.
Lamiendo no engorda ningún perro.
Por la peana se adora -o se besa- al santo.
No es un caso de mírame en mi coche es más mira el coche . Me gusta la idea de que otras personas los disfruten, porque todo se ha vuelto un poco sin rostro y a nadie le gusta ya el coche de motor.