Manos besa el hombre a las vegadas, que querría ver cortadas.
La mucha miel, empalaga.
Por mucho dulzor, no es mejor.
Nadie lamiendo engorda.
Lamiendo no engorda ningún perro.
Por la peana se adora -o se besa- al santo.
En 1978 ingresé en la Universidad de Tohoku en el Departamento de Ingeniería Eléctrica de la Facultad de Tecnología.